En el caso de los límites, se encuentra la misma estructura del sistema político. Muchas veces sus reivindicaciones fueron limitadas por actores que participan en la toma de decisiones. El Movice depende en parte de las decisiones que se tomen en el Congreso o en las distintas Cortes para que sus acciones legales repercutan. Del mismo modo, el movimiento del 89 se vio limitado por las decisiones de los constituyentes.
Ambos movimientos vieron favorecida su acción colectiva en parte por la coyuntura nacional e internacional de la época en la que se dio una apertura al surgimiento de los movimientos sociales. Sin embargo, ambos se encuentran limitados por la misma estructura descentralizada del Estado que aunque favorece oportunidades de representación puede estar más relacionada con el control social, con una idea de representación que muchas veces hace que las reivindicaciones no se vean reflejada (Uribe & Restrepo, pp. 15-60, p. 37) . Como ya se menciono aunque a los estudiantes se les haya permitido participar en la constituyente, sus reivindicaciones se encontraron permeadas por otras esferas. A su vez, aunque el Movice tenga la facultad para pasar proyectos de ley la mayoría no son aprobados, por lo que la ilusión de la representación de los movimientos sociales es constante.